Restauración de fachada de ladrillo mediante limpieza general con agua a presión regulada y recuperación de elementos ornamentales, impostas, cornisas o recercados, entre otros. Se utiliza también la limpieza a base de proyección de silicato de aluminio, el saneado de las zonas con falta de cohesión, la obtención de moldes in situ para la reproducción de piezas y la restauración mediante moldeados in situ en las zonas con menor pérdida de volumen. Se recupera el zinc existente y se aplican tratamientos protectores de fachada mediante hidrofugado de ladrillo, tratamientos biocidas, revestimientos al silicato y entonación cromática del conjunto.