Restauracion de La Giralda de la Catedral de Sevilla

Intervenciones en la Catedral de Sevilla

El equipo de KALAM ha participado en la conservación y restauración de diferentes espacios y elementos de la S.M.P. Iglesia Catedral de Sevilla, sobresaliente conjunto perteneciente a nuestro Patrimonio Mundial.

Entre ellos, se encuentra, la restauración de la Iglesia del Sagrario, que encamina su recta final, e incluye el recalce de la cimentación y la restauración de sus bóvedas, paramentos interiores y exteriores y solados, o actuaciones previas para la consolidación del terreno mediante inyecciones armadas en las alas norte y este de la Biblioteca Capitular Colombina, todos trabajos realizados con riguroso control y adecuación al bien patrimonial.

El Excmo. Cabildo de la Catedral de Sevilla, también confió en nuestro trabajo para la restauración de los salones altos de la Sacristía y las oficinas del Sagrario, donde destaca el refuerzo de las cúpulas y la puesta en valor de los arcos almohades ocultos y un espectacular aljibe encontrado, y actuaciones en la Capilla de San Andrés con el desmontaje y embalaje del retablo, el altar de mármol, los sepulcros, y la restauración del paramento de la capilla.

Esta semana, se reanudan los trabajos en la icónica torre de La Giralda, que tuvieron que ser suspendidos a causa de la pandemia. Nuestros técnicos especialistas y restauradores garantizan el cumplimiento de los criterios establecidos, bajo la dirección del arquitecto Eduardo Martínez Moya y la supervisión de Jaime Navarro, arquitecto conservador de la catedral, así como de un comité de expertos creado ad hoc para velar por el rigor de la intervención.

Junto a labores de investigación y documentación, la restauración de la torre de La Giralda ha incluido limpieza manual en seco, la eliminación de biocostra, la recuperación, consolidación, rejuntado y patinado de la fábrica de ladrillo, la restauración de la Sebka y elementos cerámicos, o la limpieza, saneado o la consolidación y rejuntado de los elementos pétreos, recuperando los volúmenes perdidos con morteros especiales de restauración para proceder a su posterior hidrofugación y patinado final. Un proceso que ha sido difundido, además de por otras vías, en una exposición en la Catedral que ha recogido los hallazgos y resultados de la metodología aplicada.

La intervención finalizará en marzo del año próximo, cuando este reconocido bien de nuestro Patrimonio Mundial volverá a lucir en todo su esplendor. 

Fotografías: Eduardo Martínez Moya y KALAM.